El poeta es un fingidor. Finge tan completamente Que hasta finge que es dolor
el dolor que de veras siente.
Y quienes leen lo que escribe, Sienten, en el dolor leído,
No los dos que el poeta vive Sino aquél que no han tenido.
martes, 12 de mayo de 2009
Poemas de Miquel Martí I Pol
Ahora que todo vuelve...
Ahora que todo vuelve: el silencio y la espera,
las palabras que hemos guardado en lugar seguro
todo este julio de viento y nostalgia.
Ahora que todo vuelve: la tibieza del cuerpo
aquietado y dócil bajo las manos amantes
y aquel perderse en las tardes tranquilas,
bosque adentro, por el tapiz crujiente de hojas de pino,
¿no es su valor este esfuerzo cálido y el quererse
con certeza a solas, la dura
voluntad de permanecer, presente ausente a la vez,
sin pensar que el tiempo es un vacío sin límites?
Mujer: nada me cuesta decir tu nombre,
aunque estés lejos. Lo escribo en las piedras y el agua,
en la sombra acogedora de los árboles a la vera del río
y en el comedor de casa. Sé que oirás
mis palabras, porque llevas en las manos
el signo de un tiempo nuevo, y has crecido en la esperanza
de que alguien lo aceptara sin hacerte preguntas.
De "He heredado la esperanza"
Versión de Adolfo García Ortega
Carta
Ahora que estoy muy solo y es de noche afuera
te escribo apenas para decirte que las cosas
nada han cambiado desde que nos dejamos,
que los árboles mueren lentamente, como siempre,
y el río sigue su curso de cada día.
Te escribo en el Pueblo y me crecen líquenes
en las manos, las palabras me resuenan
silencio adentro, entre libros y sueños.
Estoy tan solo que ni oso moverme.
El tiempo se me va entre el estorbo
que soy, si miro hacia atrás,
y el horizonte de ti que se me aleja.
Todo ahora es reposado, tal vez
porque el riesgo es mayor y me maravilla
saber que me lo juego a una palabra.
Siempre hay un gesto profundo que no se mide
ni con las manos ni con la voz, un gesto que nos deja
tan enfrente de nosotros que se diría
que hemos vuelto a nacer. Podría yo
llenar de presencias este silencio enorme
y, poco a poco, hacerlo el centro;
podría decirte cosas más concretas
para convertir en arena la soledad
y arraigarme en ella, pero entonces
un viento salado me heriría los labios
y amo más el ocio de hablarte.
He aquí pues: te escribo y es de noche afuera.
¿Qué más podría hacer por retenerte
si el tiempo nada puede ya contra la espera
que me he impuesto de ti, si no me llega
rumor alguno de la noche y estoy inmóvil
porque el silencio eres tú y temo perderte?
Cada palabra es una mano que se abre
para acoger a otra mano. Soy todo palabras
y me entrego entero porque crecer
no mancha ya mi piel ni me desconcierta.
Sé esto desde que cada cosa
se me hace presente, insólita y precisa,
al cerrar los ojos, desde que me golpea
la nostalgia como una pesadilla y vivo siempre
hacia mí mismo. Hay días -créeme-
en que me niego a pensar en ti. No quisiera
separarte del silencio ni someterte
a la medida del deseo, y en cambio
te me muestras tan clara que parece
que tengo la sangre llena de vidrios.
Ahora te escribo, ya ves, para decirte apenas
que todo es como antes, que nada cambia
en el fondo si no lo tocamos nosotros,
que sólo nos atañe este silencio
compartido, y el riesgo de creer y crecer
como árboles aislados que une, a ratos,
un mismo viento o una misma lluvia.
De "Autobiografía"
Versión de Adolfo García Ortega
Descansas, Marta, y cierro los ojos...
Descansas, Marta, y cierro los ojos
para pensarte, para verte. Fuegos lejanos
y músicas y fiestas en tu cuerpo.
El alboroto extraño de los colores
de este verano y el viento que revuelve
los cabellos derramando su claridad.
Cueva y torrente al mismo tiempo, gritaré
tu certeza, la de estos instantes
compartidos, y escucharé el eco
de cada palabra al fondo de mí mismo;
cueva y torrente, repetiré tu nombre
y mis labios te proclamarán
deseo y presencia a la vez.
Tributo de hojas y arena, tiempo y juego
calman la sed del caminante.
Descansas, Marta, y yo descanso en ti,
y te pienso dulcemente, y te veo, y te tengo.
De "Amada Marta"
Versión de Adolfo García Ortega
Descubristeis que en sólo un instante...
Descubristeis que en sólo un instante
puede amarse como en toda una vida.
Descubrísteis el gozo como una isla
desconocida que puede aparecer
ante la proa de la nave que os lleva,
una mañana ignorada,
por una ruta antigua.
Lanzáos ardientemente entonces
a la locura de amaros, ahora
que vuestro cuerpo es ágil, y haced trizas
el ánfora que conservaba el viejo perfume,
para aspirar de un solo golpe
toda su intensidad dominadora,
y quién sabe si morir después de la prueba.
De "Palabras al viento"
Versión de Adolfo García Ortega
El paso del tiempo
Se hace, pues, inútil
retomar aquellos versos
que guardamos muchos años atrás
e intentar adaptarlos
al nuevo ritmo del tiempo.
Quiero decir que, en conciencia,
ya no puede decirse ahora caridad
ni amor ni libertad como entonces.
Envejecen los versos
y la voz se nos deforma
si no tratamos, tenaces, de entender
que ha cambiado el sentido
vital de las palabras.
Es una pendiente fácil
y resbaladiza, que no nos deja
crecer. Para los que luchan
siempre se hace corto el tiempo;
los otros se extasían
y protestan, airados,
contra cualquier viento que agite
el agua del pilón que los conserva.
Y se mojan entre sí,
displicentes, con las viejas
palabras. Porque el juego
consiste en sentirse
siempre húmedo, convencido, inefable.
De "Autobiografía"
Versión de Adolfo García Ortega
He amado mucho y mucho amo todavía...
He amado mucho y mucho amo todavía.
Lo digo alegre y hasta un poco sorprendido
de un amor tal que todo clarifica.
He amado mucho y amaré mucho más
sin ninguna clase de miramiento ni trabas
que me escatimen el hondo placer
incomprensible para mucha gente.
Lo digo alegre: he amado mucho y mucho
he de amar. Quiero que todos lo sepan.
Desde la altura clara de este cuerpo
que me hace eco o me responde
cuando el deseo reclama plenitudes,
desde la intensidad de una mirada
o bien desde la espuma de un solo beso
yo proclamo mi amor: el legítimo.
De "Amada Marta"
Versión de Adolfo García Ortega
Un día estaré muerto...
Un día estaré muerto
y aún quedará la tarde
en la paz de los caminos,
en los verdes sembrados,
en los pájaros y el aire
quietamente amigo,
y en el paso de esos hombres
que desconozco y que amo.
Un día estaré muerto
y aún quedará la tarde
en los ojos de la mujer
que se acerca y me besa,
en la música antigua
de cualquier tonada,
o aún en un objeto,
el más íntimo y claro,
o puede que en mis versos.
Decidme qué prodigio
hace a la tarde tan dulce
y tan intensa a la vez,
y a qué prado o a qué nube
he de atribuir mi gozo;
porque me sé perdurable
en cuanto me rodea,
y sé que alguien, en el tiempo,
conservará mi recuerdo.
De "Palabras al viento"
Versión de Adolfo García Ortega
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Miquel Martí i Pol
(19 de marzo de 1929, Roda de Ter, Barcelona-11 de noviembre de 2003, Vic, Barcelona). Poeta, escritor y traductor catalán.
A los catorce años empezó a trabajar en las oficinas de la fábrica textil Tecla Sala, donde ya trabajaba su madre. A los diecinueve años cae enfermo de tuberculosis pulmonar, lo que le obliga a pasar un año en la cama, periodo en el que leerá muchísimo.
En 1954 gana el premio Óssa Menor con Paraules al vent.
En 1956 se casa con Dolors Feixas, con quien tendrá una hija en 1958 y un hijo en 1965. Empieza a traducir e inicia una serie de actividades públicas: da conferencias, canta junto a miembros de la Nova Cançó, colabora en revistas... A finales de esta década también se implica en las actividades políticas del Partit Socialista Unificat de Catalunya (PSUC).
A partir de 1970 empieza a manifestarse en el poeta una esclerosis múltiple que le llevará a abandonar la fábrica en 1973.
En 1978 recibe un homenaje en la Setmana Popular de Osona, organizada por la comisión de cultura del PSUC, con la asistencia de poetas como Vicent Andrés Estellés, Pere Quart, Joan Brossa, Joan Vinyoli, Ramon Pinyol y Xavier Bru de Sala, entre otros.
En 1984 muere Dolors Feixa.
En 1986 se vuelve a casar, con Montserrat Sans.
Traductor al catalán de Antoine de Saint-Exupéry (Ciutadella, en colaboración con Jordi Sarsanedas, 1965), Georges Arnaud (El salari de la por, 1968) Simone de Beauvoir (La mesura de l'home, 1969), Claude Lévi-Strauss (Tristos tròpics, 1969, El pensament salvatge, 1971), Apollinaire, Flaubert, Zola, Racine, Huysmans y Roland Barthes, entre otros.
Su obra ha sido traducida al castellano, asturiano, portugués, alemán, inglés, italiano, flamenco, hebreo, esloveno, búlgaro, ruso y japonés.
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3 comentarios:
Hola.
Me pregunto si tienes el poema de : La Música de Miquel Martí i Pol. Hace tiempo que lo busco y hoy he dado con tu blog ( un blog estupendo ).
Es para regalar a una mas que amiga.
Sebas
hola,m'ha agradat molt el blog, m'agradaria saber si algu de vosaltres sabria com possar-se en contacte amb la dona o algun familiar del poeta, ja que necessitaria fer-li una entrevista sobre la seva obra per el meu treball de recerca
si algu em pogues ajudar
atentament
radiovermella@hotmail.com
Estoy buscando una traduccion al castellano de LLETRA A DOLORS de Marí Pol. ¿Puedes ayudarme? Gracias.
mi correo es: jfusterperello@hotmail.com
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